Las horas se hacían largas en aquel local. Blue y Thin, dos trabajadoras incansables, intentaban concentrarse en su labor, pero su paz se veía rota casi a diario por la misma tortura: los aullidos estridentes del Heavy del Blues.
Allí estaba, otra vez. Justo en frente de la puerta. Un hombre de melena enredada, ropas raídas y guitarra desafinada que aporreaba sin piedad a la vez que pataleaba sobre una especie de pedal. Su cara de éxtasis lo decía todo. Este hombre amaba la música, pero lo suyo no era tocar, sino martillear el aire con acordes que no conocían ni el ritmo ni la misericordia.
- Esto es insufrible! - exclamó Blue, cubriéndose los oídos
- Me va a estallar la cabeza! gritó Thin, mientras otro distorsionado acorde retumbaba como un trueno maldito.
Entonces, entre suspiros y miradas desesperadas, algo curioso ocurrió. Las dos mujeres, casi al unísono, cerraron los ojos y desearon en silencio: "Que alguien...quién sea...se lo lleve de aquí!.
El viento comenzó a soplar más que de costumbre, de manera extraña, levantando hojas y papeles, formando remolinos locos que parecían bailar sus desatinadas melodías.
De pronto, frente al músico apareció una figura alta, envuelta en una capa oscura que flotaba como el humo
- Soy Zéfiro, el guardián del silencio -declaró con voz profunda-. Y tú, Heavy del Blues, has sido convocado para cumplir tu destino
- Eh? - el músico apenas tuvo tiempo de soltar su guitarra cuando el viento lo envolvió, y en un parpadeo, desapareció junto a la figura misteriosa
Blue y Thin, se asomaron a la puerta incrédulas, disfrutando del silencio que por fin reinaba. Sin imaginar que en algún lugar lejano, el Heavy del Blues, había dejado de ser un ruidoso trovador callejero para convertirse en Sir. Bluesdark, el espadachín errante
En el reino del silencio, Sir. Bluesdark, era un héroe que ya no derrochaba acordes desafinados. Ahora, blandía una espada brillante. Montado en un corcel de sombras, luchaba contra monstruos y protegía aldeas. Descubriendo que la verdadera música estaba en el clamor de las aventuras y en los ecos de los gritos de victoria.
Cada vez que alzaba su espada, un acorde suave y perfecto sonaba, mucho mejor que los que había dejado en su vida de atrás.
Con el tiempo, se unió a una compañía de guerreros errantes, donde encontró amigos leales y enemigos temibles. Cada batalla era una sinfonía de acero, y su nombre se convirtió en leyenda.
Se enfrentó incluso a un dragón silencioso. Una criatura que devoraba sonidos, sumiendo a los pueblos en un mutismo aterrador. Con su espada que ahora cantaba notas perfectas, logró derrotar a la bestia y liberar las voces atrapadas.
Fue nombrado entonces guardián del sonido, protegiendo para siempre las mas bellas melodías del mundo
Pero aquel solo era el comienzo de su leyenda...
El resto, está aún por escribir...si es que el viento se lo lleva...

Hola, Finil, yo quiero que ese guardián del silencio se dé una vuelta por aquí, tengo ciertos vecinos y unas cuantas motos con el tubo de escape "estropeado" que silenciar. Porque, espero, ese guardián no solo protegerá las melodías más bellas, sino también todo sonido estridente que se produzca, igual que en tu relato. En fin, dime cómo lo contrato...
ResponderEliminarUn abrazo. :)
jajajaj Merche, no no..
EliminarEse guardián debe rondar nuestras calles, el del silencio claro. A ti te puedo mandar una capa de humo o el guardián del sonido, que igual vale el viento que un alma caritativa que lo adopte. Eso sí, ten cuidado con quién te llevas que igual acabas arrepintiéndote e intentas devolverlo, cosa que no conseguirás porque ya te habré proporcionado una dirección falsa, que me cuide las espaldas. Lo quieres? jajaja vas a ver que juerga!!
Un abrazo danzarín
A ver si puedo convocar a Zéfiro con algún disco de Vomitory, para que me acompañe a la gala de los Grammy, a Operación Triunfo, Got Talent y similares, y me ayuda a hacer limpieza en pro de una descontaminación acústica necesaria y urgente. :))
ResponderEliminarCabrónidas!! Invocar a Zéfiro con un disco de Vomitory para hacer limpieza sonora suena a conspiración, a exorcismo, a la purga de los escenarios.
EliminarSi vas con Zéfiro a los castings, soplad fuerte, que los jurados se aferran a sus sillones como percebes a las rocas. Y que los vientos arrastren a los cantantes de karaoke al reino del silencio, porque al final, la verdadera limpieza no es acústica sino mental. Que si van a desafinar que lo hagan en la ducha..como todo el mundo..
Un saludo y calla calla...que ahora no se oye nada..
Hola Finil. Me parece que necesito invocar a Zefiro, sobre todo los fines de semana, que los vecinos se pasan... jejeje. Me encantó tu relato y el nuevo y heroico destino que le das al músico, ahora como Sir BluesDark. Y es que todos venimos con un don, lo difícil es atinarle a cuál es. Un relato muy original, con un ritmo como me gustan, ágil, y con un final lindo. ¿Qué más se puede pedir? Saludos...
ResponderEliminarjajaja Los vecinos...
EliminarCon ellos siempre te queda una acción más heroica Ana: convertirlos en personajes de un buen relato. Con los ojos rojos quizás? llamando a tu puerta como un apocalipsis zombie y arrastrándose por las escaleras?. Que al menos sirvan de inspiración
Sobre el músico..bueno, a veces el destino se empeña en llevar la batuta y...digamos que el tuvo suerte, porque yo tendría otros planes para el
Gracias por tus palabras. Y si necesitas a Zéfiro, te mando alguna oración que tenga por aquí para convocarlo
Hola finil, yo necesito invocarlo los domingos de verano, que cuando estoy en el campo con mi madre, los vecinos de la parcela de enfrente, en sus fiestas piscineras me inundan con esa cosa llamada regueton, y mis maldiciones para que se les rompa el equipo de sonido, no funcionan🤣
ResponderEliminarUn abrazo heavy 🤗🍫
Dakota!!! que te veo haciendo tuerking jajaja
EliminarPara combatir a los vecinos del universo reguetón, Zéfiro que está aquí, te propone una estrategia: coloca unos altavoces y contraataca con algún buén himno de rock ochentero. El "Eye of the tiger" por ejemplo. A todo volumen. Para recordarles que los guerreros del buen gusto aún resisten. Y si no te sirve, que va para allá dice. Que lo invoques en verano..y que a ver en qué reino los mete jajajaja
Un abrazo sonoroso!! rockero, por supuesto
youtube.com/watch?v=3c7blSLhVl8
ResponderEliminarDiablos!! Orlando este enlace no funciona...mándalo bien que no me puedes dejar intrigada!!
EliminarBusca en
EliminarYouTube,
Iron Horse,
Enter
Sandman .
Hostias!! una versión de Metallica con bandurrias?? Le pega mogollón jajaja
EliminarFinil, ¿me prestas a ese guardián del silencio para este verano? Porque ya veo venir el desfile de vecinos que tienen aquí su segunda residencia, con sus charlas a gritos y sus niños con energía infinita. 😵💫 Necesito que Zéfiro se venga para acá dentro de mes y medio.
ResponderEliminarUn abrazo silencioso 🤗🤫
Bip! Bienvenida al servicio de atención de Zéfiro.
EliminarEstimado usuario, Zéfiro se encuentra actualmente en misión de vigilancia y tranquilidad en su destino asignado. Su espíritu refrescante y su temple pacificador, están actualmente al servicio de su actual ubicación. Sin embargo no se preocupe, su solicitud ha sido recibida. En caso de que Zéfiro decida ampliar su jurisdicción, se le notificará oportunamente.
Tenga en cuenta que los vecinos ruidosos y los infantes de energía infinita son tratados con su legendaria diplomacia: una leve brisa para enfriar ánimos y un susurro suave para reducir los decibelios
Gracias por confiar en Zéfiro, el guardián del silencio
Bip! fin del mensaje
Si es que está saturao el hombre..jajajaja
Un abrazo silencioso y con bombilla led...con bombilla...
Necesito al tipo ese, tenemos un personaje aquí ciertamente inaguantable. 😂
ResponderEliminarjajaja otro? Pues si le compré un móvil de última generación y ya me pone el contestador hasta a mí que lo he invocado!!...A ver como lo hacemos, ponte en lista de espera, que todos los que tienes arriba, ya solicitaron sus servicios jajaja
EliminarSaludos!! Y que la espera sea breve..
Lo primero quiero felicitarte por la capacidad que tienes de transformar algo tan mundano e insufrible, en una historia tan chula al nivel de fantasía, que podría hasta llegar a caer como leyenda urbana. Nadie más que Thin y Blue saben la necesidad de que esto ocurra de verdad. Conforme leía más me divertía, y ese final abierto… ¿habrá más capítulos sobre el Heavy del Blues? Al final hasta se le coge cariño…
ResponderEliminarPor cierto, casualmente teníamos algo parecido por aquí, por nuestras tierras urbanas, todo parecido con la realidad es pura coincidencia, pero nuestro “heavy del blues” no ha vuelto a sonar desde que abriste las puertas de Zéfiro. Gracias.
Ay Celeste...Se que tienes la prueba irrefutable de que el universo ha desarrollado un sentido del humor cruel, del que yo soy su más fiel víctima. Verdad?. Tengo la sospecha de que llevo un imán cósmico para la mala suerte, y que ese mismo imán es el que atrajo al Heavy del Blues a mi vida y a la de los que tengo alrededor. Y aunque lo lancé en una odisea épica, ha vuelto de nuevo como un boomerang del infierno. Gracias por tus palabras Celeste, y no ..no descarto un capítulo dos, porque si el, ha tenido la desfachatez de volver, yo estoy dispuesta a devolverle la cortesía.
EliminarQue tiemble, porque allí donde el heavy desafina estaré yo, lista para hacerle un solo de venganza...
Un abrazo sin consuelo
¡Finil!
ResponderEliminarEste texto es un caramelo con capa de ironía y relleno de fantasía bien servida. Empiezas con algo tan reconocible que duele —ese músico de calle que no afina ni con GPS— y nos llevas de la mano a un mundo donde el caos sonoro se convierte en leyenda. Y lo haces con una naturalidad que engancha desde el primer acorde desafinado.
La estructura es impecable: presentación de conflicto (el insufrible heavy), deseo silencioso (literalmente), giro mágico (la aparición de Zéfiro) y resolución inesperada con epílogo legendario incluido. Me encanta cómo usas lo fantástico no para escapar, sino para reinterpretar la realidad. El relato tiene el tono justo de parodia amable, sin pasarse de ácido, y eso le da muchísimo encanto.
Pero más allá del humor (que está perfectamente dosificado), hay una inteligencia narrativa que me fascina: la conversión de ruido en música, de incordio en héroe, de guitarra desafinada en espada lírica… ¡eso es alquimia literaria! Y ese final, con “el resto está aún por escribir, si es que el viento se lo lleva”, funciona como cierre abierto con eco mitológico. Redondo.
Y ojo, que además nos regalas personajes simpáticos, un universo potencialmente expandible (yo quiero más de Sir Bluesdark) y un uso del lenguaje ágil y preciso. Las pausas, los diálogos cortos, el ritmo rápido… todo fluye.
En resumen: conviertes el infierno sonoro en cuento fantástico, metes épica sin perder el humor y encima lo cierras con esa sonrisilla de “bueno, igual todo esto pasó… o no”. Pues sí: yo firmo porque haya más.
Gracias por este rato tan bueno, Finil.
Y si Zéfiro necesita un asistente, que sepa que por aquí hay demanda.
¡Un abrazo con pedal de distorsión controlada, compi!
Buenas Tarkion!!!
EliminarQue alegría verte por aquí!!
Duele, si. Duele cuando un músico desafinado decide mudarse al mundo de las leyendas..y más duele cuando decide volver.
Porque ya es una espina clavada. Y claro que merece un segundo capítulo, pero no porque quiera hacerle un favor, sino porque ya es una cuenta pendiente. Y esta vez no correrá la misma suerte, porque su destino lo voy a elegir yo. Zéfiro ha sido demasiado benévolo con el. Y como no le puedo propinar la patada voladora que se ha ganado, me conformaré con el mejor bálsamo para un oído torturado, que es una buena y merecida venganza literaria
é o no! ... pues eso..
Un abrazo Capitán!!
Qué maravilla de relato, Finil. Empieza como una sátira callejera y termina en epopeya sonora. El "Heavy del Blues" es un personaje que uno primero quiere expulsar… y luego seguir en su viaje con mapa en mano. Me ha encantado cómo el ruido se transforma en música, y el músico en héroe: pura alquimia narrativa.
ResponderEliminarEse giro hacia lo épico con Zéfiro y el dragón que devora sonidos es brillante. Convertir la distorsión en leyenda y la guitarra en espada me pareció poético y muy rockero. Espero que el viento no se lo lleve del todo, porque yo ya quiero leer el próximo capítulo de Sir Bluesdark.
Buenas Luís
EliminarNo tienes ni idea de la venganza que le espera...Prefirió volver de aquel sitio donde fue un héroe, para volver a ser un músico mediocre.
Así que habrá que buscarle un lugar mucho más lejano y oscuro donde no pueda alcanzarnos, ni decidirse a volver. Un plano de bytes de esos que fabricas tú.
Si el destino me lo permite, haré que sus perdidas melodías, se pierdan aún más. Esto ya es personal. Es una misión de exilio sonoroso!!
Un abrazo Luis. Me alegra verte por aquí!!